MARCAROPA: EVOLUCIÓN DE UNA EMPRESA FAMILIAR EN EL SECTOR DE LA PERSONALIZACIÓN
Las impresoras / cortadoras VersaStudio y VersaCAM de Roland DG claves en el éxito de esta familia de emprendedores
Crear un negocio siempre es un reto en el que se tiene que hacer frente a incertidumbres, dudas y nuevos conocimientos. Este es el caso de la empresa textil Marcaropa, especializada en la venta de etiquetas para marcar ropa y que desde sus inicios ha ido evolucionando en el sector y ha apostado por la tecnología de impresión digital para adaptarse a la nueva demanda y seguir creciendo.
En la década de los años setenta, Juan Moya, creó su propio negocio de pañuelos. Unos años más tarde consiguió aplicar material termoadhesivo en la tela y empezó a fabricar rodilleras. Fue en este momento cuando se lanzó a fabricar las primeras etiquetas para marcar ropa, en las cuales, los propios clientes tenían que escribir su nombre con bolígrafo. Años más tarde, incorporaron la tecnología para imprimir el nombre directamente de fábrica.
En 2006, la siguiente generación, formada por sus hijos, tomó el relevo y llevó el negocio al siguiente nivel. Los dos hijos apostaron por crear nuevos productos, ampliar la red de clientes y crear una estrategia que ha permitido a la empresa convertirse en unos de los fabricantes de etiquetas personalizadas de tela más importantes de España.
La empresa evolucionó de la mano de sus clientes y gracias al salto al canal online con la web de Marcaropa, la primera web de etiquetas para niños en España. La web inicial era muy básica, con un único producto, pero poco a poco, ampliaron la gama de productos, añadiendo nuevos diseños más creativos para adaptarse a las necesidades de sus clientes.
Según explica Paloma Álvarez Jariego, gerente de Marcaropa:
“Actualmente, no solo vendemos etiquetas para marcar ropa o material escolar, también fabricamos etiquetas para marcar la ropa deportiva, para identificar la ropa de personas de la tercera edad que están en residencias, uniformes y ropa de trabajo, así como etiquetas hechas a mano para diseñadores que necesitan tiradas cortas y exclusivas”.
Para dar respuesta a la amplia demanda de sus clientes, la empresa incorporó una impresora/cortadora VersaSTUDIO BN-20 de Roland DG. Este versátil equipo de sobremesa con tinta eco-solvente les permitió imprimir y cortar en un solo equipo infinidad de etiquetas personalizadas. Más adelante, la expansión de la empresa los llevó a adquirir tres nuevas impresoras/cortadoras Roland VersaCAMM VS-300i, una tecnología reconocida por su versatilidad y porque ofrece una calidad de impresión excepcional gracias a sus cabezales y a las tintas eco-solventes.
